Esta fuente de cerámica artesanal combina un acabado brillante en beige con salpicaduras marrón, creando un efecto visual único y atractivo.
El acabado brillante realza la luminosidad de la pieza, mientras que las salpicaduras marrón aportan un toque de dinamismo y rusticidad. Ideal para servir una variedad de platos, desde aperitivos hasta postres, o para utilizar como una pieza decorativa en la mesa.
Cada fuente es elaborada a mano, asegurando que cada una tenga su propio carácter y variaciones sutiles, lo que la convierte en una pieza exclusiva que resalta la belleza y la artesanía de la cerámica.